Fiel a su estilo, Donald Trump acaba, otra vez, de ofender a América Latina preguntándose porque los Estados Unidos tienen que recibir inmigrantes  de “las letrinas” que son El Salvador y Haití, y no de Noruega.

La pregunta ofendería sino viniera de él, el peor espécimen del “ugly american” que ha sufrido la gran nación norteamericana.   Y lo es, porque representa la máxima expresión de ignorancia, incultura y desconocimiento histórico, típico de cierto segmento poblacional de USA.

He aquí algunos datos que quizás ayuden a Trump a entender porque emigran los salvadoreños a su país (luego hablare de Honduras, Nicaragua y Haití); una serie de artículos que espero su Embajada traduzca y que sirva para instruir al más analfabeto en Historia de sus presidentes, desde la fundación de Norteamérica.

1.-Lo primero que llama la atención sobre El Salvador es su pequeñez  geográfica  y su inmenso número de muertos.  A saber 75,000 civiles, y 9,000 desaparecidos, víctimas de la guerra civil entre 1980  y 1992.

2.-Noticia que no tendría que ser del interés de Trump sino fuera porque esos muertos son el resultado de mil millones de dólares de ayuda militar norteamericana al Ejercito del Salvador; y de un programa del “asistencia técnica” para la formación de ORDEN (“Organización Democrática Nacionalista”), organización paramilitar.

3.- ¿Con que fin?   Impedir que el campesinado salvadoreño, esclavizado desde 1898, por catorce familias de origen europeo, que habían convertido al país en una “Republica Cafetalera” (al igual que aquí una “Republica Azucarera”), influenciados por la Revolución Cubana, dieran al traste con los gobiernos militares que siempre la gobernaron en defensa de los intereses de esa oligarquía cafetalera.

4.-En 1931, coincidiendo con el ascenso al poder de Trujillo, y de los Somoza en Nicaragua, se instala una dictadura militar hasta 1979, que desemboca, al igual que aquí en el 65, en una guerra civil, con un enorme saldo de muertos y desaparecidos.

5.-Impresiona el listado de militares que han gobernado  El Salvador.   Lo  que una se pregunta es ¿que interés podía tener los estados Unidos en apoyar a una elite de catorce familias en desmedro de la mayoría de la población de ese país?  Eso se lo pregunto Kennedy y por eso creo la Alianza para el Progreso, lamentablemente muy tarde, por lo que tuvo que acompañar sus tímidas iniciativas desarrollistas con “asesoría militar” y mil millones de dólares.

6.-El asesinato del Arzobispo Romero, 28 sacerdotes, y cuatro monjas norteamericanas; la toma de 33 iglesias y 41 ataques con ametralladoras a otros templos, por los paramilitares, finalmente provoco una reacción mundial,  tardía para evitar el éxodo salvadoreño a USA, ahuyentados por la mierda, dear Mr. Trump.

Por REDH-Cuba

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