Se trata de una campaña claramente orquestada, y financiada por millones de dólares aprobados por el Congreso de Estados Unidos, aseveró la autora de varios libros sobre la isla caribeña.
Yaffe resaltó, además, la respuesta del Gobierno cubano y del presidente Miguel Díaz-Canel, quien reconoció en primer lugar la existencia de desigualdades y problemas exacerbados por el bloqueo estadounidense y la pandemia de ka Covid-19, y ahora recorre los barrios más vulnerables para escuchar a la población.
El periodista estadounidense Max Blumenthal, de la publicación independiente The Grayzone, se refirió, por su parte, al intento deliberado que hacen algunas organizaciones foráneas de influir en la juventud cubana, sobre todo la de sectores marginales, a través de géneros musicales como el hip hop y el rap.
Según Blumenthal, esa estrategia incluye el envío a Cuba de contratistas de inteligencia con experiencia en otros países para actuar como publicistas de raperos y amplificar sus mensajes contestarios.
Reed Lindsay, de Belly of the Beast, explicó al centenar de participantes de diversas partes del mundo que se conectaron al encuentro online algunos de los impactos más recientes del recrudecimiento del bloqueo estadounidense y mencionó, en particular, las dificultades que enfrenta el sector biotecnológico cubano para producir las vacunas anti-Covid-19.
El analista expresó, además, que no se siente muy optimista sobre la posibilidad de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden,el expresident vaya a intentar aliviar los sufrimientos del pueblo cubano, pese a sus promesas de que revertiría las sanciones impuestas por el expresidente Donald Trump (2017-2021).
Desde Cuba, la periodista Cristina Escobar apuntó al uso que hace el Gobierno estadounidense del dinero de los contribuyentes para financiar campañas mediáticas y a la llamada prensa independiente, con el objetivo es promover un cambio de régimen en la isla.
Los hechos del 11 de julio fueron una combinación de esta manipulación en las redes sociales, refirió Escobar, en alusión a que muchos de los sucesos fueron sacados de contexto o proporción para dar una imagen de caos.