Mike Pompeo (director de la CIA): Mentimos, engañamos y robamos. Teníamos hasta cursos de entrenamiento completos (declaración en una conferencia en la Universidad A&M de Texas el 15 de abril de 2019). ¿Quién manda a sus hijos a semejante universidad?, porque ¿esa es la gloria y el honor del régimen de EEUU?, es allí donde se va a aprender. Los presentes aplaudieron y rieron hasta cansarse, ¿esa es la lección de todos ellos para que escarmiente el mundo?, ¿quién se siente proimperialista?: solo los mentirosos, los falsarios, los ladrones, … y los mercenarios.
Pero hay algo más que no dijo y, aunque ya se sabía ahora sale a la luz, sí también dan golpes de estado, declaran guerras, asesinan a personalidades en cualquier parte del mundo. El caso es que antes de semejante declaración de Pompeo, que hizo el 15 de abril de 2019, en 2017 tenía elaborado el plan para asesinar o secuestrar a la persona capaz de mostrar al mundo lo que el ejército imperial hace donde entra, Julián Assange, director de Wikileaks, enseñaba al mundo la grabación de una operación de terrorismo que los seguidores de Pompeo habían realizado en Irak contra civiles, hombres, niños, médicos de una ambulancia y periodistas. Pompeo había declarado: Mentimos, engañamos y robamos, Assange había puesto en claro una cosa más: asesinaban. Y los esbirros del capo de la CIA han estado preparando su asesinato, o su secuestro para desaparecerle. Se ha sabido que lo proyectaron en mesa de gobierno, según 8 funcionarios yankees que participaban en la propuesta, según ha aparecido en Yahoo News. ¿Escuchan ustedes los aplausos de toda esa gente de bien que acudió con los pupilos universitarios del imperio a reirle al personaje que admiran? Lo han adivinado, ese personaje es el mismo Mike Pompeo, al que el nazi Trump nombró jefe de la CIA, del mismo al que el arrepentido CIAtico que le ha descubierto le atribuye la siguiente declaración sobre Assange: irrumpir en la embajada (de Ecuador), sacar (a Assange) y llevarlo donde queramos. Discutieron la orden de que la policía inglesa mirase para otro lado, pero finalmente los ingleses, según parece, negociaron con el gobierno de Ecuador y lo secuestraron ellos. ¿Con qué fin? En Inglaterra , siguiendo los pasos de EEUU, se pretende aprobar en el Parlamento una ley con la que perseguir lo que denominan actividad hostil, calificando así a la información que se difunda que no interese que se conozca, y la referencia es la publicación por Wikileaks y su director Julián Assange de los crímenes de estado, crímenes de lesa humanidad.
Semejante intención nos hace volver a Trump en el momento en que se reunían para planificar la eliminación de Assange, Trump preguntó si le podían matar y cómo podría hacerse. Lo mismo unos que otros nos enseñan su calidad humana, la de los gobiernos de EEUU e Inglaterra, y también la de su tropa. Ahora bien, hay que abrir el concepto tropa porque los que se dicen medios informativos y sus profesionales son parte de esa tropa mercenaria, todos los que escandalizan con que unos individuos pagados por el mundo del capital, el mismo que a ellos, hagan un alboroto contrarrevolucionario en una ciudad de Cuba, asediada como la tienen, o se callen ante el bloqueo que impide comprar alimentos, medicinas, combustible, … , y lo mismo a Cuba que a Venezuela o a Nicaragua, todos esos medios informativos gritan para hacer daño, y se callan por el daño que causan sus amos, son los mismos que no abren la boca ante las declaraciones recogidas sobre el proyecto criminal estadounidense de asesinar al héroe que enseñó la verdadera cara del imperio.
Lo que aun nos debe alarmar más, que sirva para abrir los ojos definitivamente sobre esta clase de democracia, es saber que ninguno de esos que se llaman partidos parlamentarios, ninguno de sus miembros tampoco por suelto, ha dicho una sola palabra en ningún sitio, ni se ha sabido de ello en ningún parlamento, ¿por qué?: el mentimos engañamos y robamos, … y asesinamos, … y callamos, lo pagan los mismos Pompeos, por lo que se ve éstos los tienen en nómina.
A la vista del mundo se encuentra Julián Assange, la admiración y el respeto mayor por quien ama la vida, la defiende y nos enseña aun siendo perseguido, hoy secuestrado en una cárcel de máxima seguridad inglesa, por los imperialistas.