Revisitando los vínculos de la canción y los cantores de la región latinoamericana, Canto de todos prosiguió sus actividades este 8 de septiembre con el encuentro teórico acaecido en Casa de las Américas. Con la presencia de artistas de varios países de la región el encuentro resultó un espacio idóneo donde confluyeron experiencias, anécdotas y resultados del quehacer de los participantes, unidos en esta ocasión con la máxima de ver a la canción como elemento común para la transformación social en sus múltiples aristas.
Iván Soca, coordinador del evento, condujo el intercambio donde se compartieron puntos de vistas sobre varias iniciativas, temas y experiencias relacionadas con el trabajo de los creadores en sus respectivos países y en la propia Cuba. “Es una reunión donde han venido delegados de ocho países y venimos a vernos las caras para definir el nuevo futuro del Canto de todos, ahora sin Vicente, aunque él es su alma inspiradora y fundamental”, afirmó.

Como parte de las ponencias, los cantautores colombianos Jaz Arenas y Óscar Alfonso compartieron sus vivencias en la organización, gestión y manejo del Encuentro Latinoamericano de la Cultura “El Sinsonte”. Abordaron el origen del proyecto, su proyección y financiamiento, las acciones desarrolladas en comunidades, la concreción de espacios de intercambio y su ampliación a otras manifestaciones artísticas. Marcado desde sus inicios con homenajes a Facundo Cabral, el encuentro exalta las músicas populares y promueve la cultura, el arte y la solidaridad entre los países latinoamericanos. Su próxima edición se desarrollará del 11 al 13 de octubre próximo.
El músico, docente y compositor argentino Sebastián Echarry, detalló la experiencia de la Federación Argentina de Músicas y Músicos Independientes. El registro de quienes se dedican a la música fue uno de los aspectos más destacados por él: “Una de las acciones fundamentales del Instituto Nacional de la Música es el registro de quiénes somos. Hoy hay cien mil personas registradas con nombre y apellidos, género, material, contactos desde el Instituto. No estamos hablando en nombre de dos o tres, o en nombre de alguien que quiere, reclama o dice algo. Este movimiento en Argentina, que nace del 2000 para acá, aproximadamente desde el nacimiento de Canto de Todos, tiene que ver con una representatividad cada vez más grande».

También reseñó la importancia de la creación de la Agregadora digital de Música Argentina, primera distribuidora de música digital pública del mundo. Resaltó el acceso gratuito a la plataforma desde el año pasado y las ventajas de la plataforma para la preservación de música argentina, dispersa anteriormente en plataformas internacionales. «Eso nos permite generar políticas públicas», afirmó Echarry. Igualmente reseñó la distribución de los fondos del Instituto Nacional de la Música en fomentos decididos en consejos regionales, formados a su vez por representantes de las asociaciones civiles de músicos independientes en las distintas provincias.
“La décima como instrumento de combate y la conciencia desde lo ancestral y la belleza» fue el acápite elaborado por el cantautor venezolano Leonel Ruiz, quien refirió la extensión de la décima en la región latinoamericana y su utilidad para la transmisión de mensajes. “También es una herramienta política no solo para hacer proselitismo sino para hacer políticas desde las profundidades de la filosofía, la identidad y de lo decolonial”. Es un maravilloso instrumento, agregó, para promover nuestra identidad, nuestra cultura. En el encuentro participó la cantautora Elena Gil, quien compartió un canto aborigen con la audiencia y reafirmó su identidad y talento desde el amplio registro interpretativo que posee.
Durante la jornada, esas y otras intervenciones confirmaron a Canto de todos como un espacio común, una amalgama de experiencias y sabares compartidos, de múltiples géneros, visualidades y formas de expresión; como reafirmación del propósito original de Vicente Feliú en la creación de esa iniciativa.
Fuente: La Jiribilla