Transcripción del Capítulo 15 del Podcast A Contracorriente, un espacio para mirar la cultura desde todas las aristas. Producción: Radio Cubana. Realización: Erick Méndez Díaz. Periodista: Isabel Díaz González. Idea y Gestión Editorial: Omar González Jiménez. Frecuencia: semanal (todos los sábados). Enlace principal: https://www.radiocubana.cu/podcast-a-contracorriente/
Participantes: Yasel Toledo Garnache (YTG), periodista, ensayista y escritor; Omar González Jiménez (OGJ), escritor, profesor del ISRI e integrante de la REDH, e Isabel Díaz González (IDG), periodista y conductora de programas en Radio Rebelde.
VOZ EN OFF DE EMD: Esto no es un podcast, es una invitación a pensar en cómo somos. A Contracorriente, un espacio para mirar la cultura desde todas las aristas.
IDG: La bienvenida a un nuevo episodio de A Contracorriente. Comenzamos un ciclo dedicado a los jóvenes y la cultura, a la vanguardia artística juvenil en nuestro país. Y para ello nos acompaña, y también le doy la bienvenida, el profesor Omar González, quien ya es habitual en el espacio y es nuestro anfitrión.
Hoy tenemos el placer de conversar de cultura y juventud con Yasel Toledo Garnache, quien es el presidente de la Asociación Hermanos Saiz. Él es también director de la revista El Caimán Barbudo, periodista, ensayista, escritor.
Yasel estará acompañándonos durante este ciclo o pequeña temporada que vamos a dedicar a la vanguardia cultural juvenil en nuestro país; a traerlo como el tema importante, relevante, que es dentro de la cultura cubana. Profesor, ¿qué opinión le merece este nuevo ciclo de episodios de A Contracorriente?
OGJ: Bueno, Yasel, nosotros, como habrás visto en el podcast, hemos hecho un esfuerzo por tratar de conceptualizar, de abordar temas de la cultura en su acepción más amplia, digamos, trabajar en sus significados, precisar en uno mismo esos conceptos para saber bien de qué se trata, a dónde vamos, ¿no? Porque, como sabes, hay muchos conceptos de cultura, hay más de ciento cincuenta reconocidos y socialmente establecidos. Pero ya se habló de eso en el segundo capítulo. Y no obstante la amplitud y la diversidad, que es válida, es fundamental el papel que tiene la juventud hoy en día, en una época como la que estamos viviendo: turbulenta. Pero también de cambios, de grandes cambios. Los lenguajes han cambiado mucho y ahí los jóvenes son protagonistas. Las generaciones más jóvenes tienen que ver de manera determinante con estos cambios, muchos de los cuales se han producido en la esfera tecnológica, en el campo de la visualidad, precisamente. Entonces, los jóvenes no pueden faltar en este podcast. Son los primeros que nos interesan.
Por eso, el encuentro con la Asociación, que ha hecho tanto en nuestro país por el bien de la cultura, por socializarla, por conferirle una visión novedosa, por dar participación al otro, por llegar a la base y hasta los lugares más recónditos, por romper los moldes de una organización social de este tipo, que generalmente se queda en un ámbito muy cerrado, como una nueva élite, digamos, que puede surgir en su propio mundo. La Asociación Hermanos Saiz ha roto todos esos moldes, todos esos límites.
Entonces, nada mejor para esto que hablar contigo, que eres un creador y que eres, además, una persona que conceptualiza sobre estos temas habitualmente. Tu presencia en este espacio puede ser muy útil para conformar esa idea.
YTG: Muchas gracias a ustedes. Para mí es un placer tremendo participar, estar aquí con ustedes y conversar sobre estos temas, en tiempos, además, en que la cultura, de manera general, sigue teniendo una importancia vital, yo diría, cada vez más, no solamente en el panorama cubano, sino a nivel internacional, a nivel global, pensando siempre la cultura en ese sentido más amplio, y la importancia que tiene para la sensibilidad, para las personas en general, incluso para afrontar la vida no solamente en lo individual, sino en lo colectivo; los seres humanos a nivel global.
IDG: Se impone, por supuesto, partir de que todos conocemos a la AHS, su gestión, su labor, en los últimos tiempos; además, muy renovado el quehacer de la AHS en los últimos tiempos.Pero vamos a partir primero del concepto, de la noción de cultura dentro de la AHS. ¿Qué es la AHS hoy y cuánto impacta en la cultura cubana?
YTG: La Asociación es una organización de la cual nosotros estamos completamente enamorados, es la organización que en Cuba agrupa a los jóvenes escritores, artistas, investigadores de hasta 35 años de edad, pero es una organización que tiene también una historia muy favorable, y tenemos que recordar que, por ejemplo, los antecedentes de la Asociación son el Movimiento de La Nueva Trova, la Brigada Raúl Gómez García y la Brigada Hermanos Saiz, de la cual, por ejemplo, Omar fue presidente nacional, y hubo un gran encuentro el 18 de octubre de 1986 con representantes de esas tres organizaciones, se produjo un debate, y así nació entonces la Asociación Hermanos Saiz, que a lo largo del tiempo ha sido capaz de eso que mencionaban ustedes. O sea, la Asociación ha sido capaz de ser muy activa. Tiene más de 100 eventos en todo el país, tiene una plataforma de más de 50 becas y premios, pero, además, constantemente va a las comunidades, a los centros laborales, a las escuelas. Es una organización que no se conforma con estar en los escenarios, con estar en las ciudades. Nosotros lo más valioso que hacemos es estar constantemente en las comunidades, pero en comunidades muy alejadas. Hoy la Asociación hace cruzadas en el Escambray, en la Sierra Maestra. Nunca nos detenemos. Y creo que parte de lo más positivo que tiene la AHS es ese afán de hacer las cosas siempre en el menor tiempo posible –algo que caracteriza a los jóvenes.
Y cuando uno mira la historia se da cuenta de aspectos muy concretos que ha logrado la organización. Ahí están los congresos anteriores, los cuatro que hemos efectuado. Y creo que parte también de lo más favorable, es cómo la Asociación, en sus debates, en sus análisis, va más allá de la cultura, y en eso pienso que ayuda mucho la inteligencia colectiva que hay a su interior. Cuando uno piensa ahí hay escritores, hay músicos, hay actores, hay jóvenes cineastas, hay artistas visuales, pero hay también investigadores, hay también críticos culturales, hay profesores universitarios, hay másteres en ciencias, doctores en ciencias, eso, por supuesto, enriquece mucho los debates que se originan al interior de la organización.
OGJ: Quería hablar del tema del pensamiento crítico y de los públicos. ¿Cómo ustedes influyen en el público, cómo se da esa relación con los jóvenes, si logran tener una influencia cada vez mayor, tan necesaria en nuestra sociedad en estos momentos?
YTG: Para nosotros es vital el pensamiento crítico en el sentido más amplio, primero en la crítica cultural, la Asociación hoy tiene varios espacios, tiene publicaciones como es el caso de Puntal, que hacemos en Pinar del Río, u otros espacios, como el mismo congreso de pensamiento Memoria Nuestra, que hacemos en las Romerías de Mayo; Pensar al Sur, que hacemos en Santiago de Cuba; espacios en los medios tradicionales de comunicación, que van a eso, a la crítica cultural, por la importancia que tiene, primero, en la transformación, la formación de los públicos, pero también para crecer cada uno de nosotros como creadores. Siempre es muy bueno que haya personas que nos den opiniones, que nos digan, musicalmente, cómo un disco pudo ser mejor, qué le faltó en la exposición para que tenga más valores en lo artístico. Menciono eso, o sea, en el sentido más amplio de ese pensamiento también crítico, porque en la Asociación se debate mucho sobre temas sociales. Pensamos siempre en cómo nosotros podemos ser cada vez más útiles a la sociedad de manera general, cómo llegar mejor a los diferentes públicos. La Asociación todo el tiempo pretende llegar, por ejemplo, a través de las plataformas digitales, a través de medios tradicionales, como la misma radio, la televisión, pero cada vez más le estamos dando mucha importancia a ir al encuentro directo con los públicos, a estar en los escenarios establecidos, pero también en los barrios.
Nosotros aspiramos a una Asociación que esté absolutamente en todos los lugares posibles, que llegue, que brinde arte, pero también que converse, que debata, sobre todo con los jóvenes. Es por eso que en los tiempos actuales, por ejemplo, para nosotros la prioridad está en las universidades, estar cada vez más en las universidades, en los preuniversitarios, en las escuelas secundarias básicas.
Aspiramos a que cada vez más la población cubana conozca quiénes son los mejores creadores jóvenes del país hoy, conozca quiénes son los artistas visuales más interesantes que tiene Cuba entre los jóvenes, cuáles son también los músicos, incluso pensando no solamente en el interior en Cuba, en el pueblo cubano, sino que aspiramos a que eso se conozca cada vez más también a nivel internacional. Hoy nos pasa con mucha frecuencia que cuando preguntamos aquí o en otras partes del mundo cuáles son algunos de los más grandes escritores cubanos, se sigue mencionando, solamente a esos que siempre van a ser referentes para nosotros, que son Guillén, por supuesto Lezama, Alejo Carpentier… Pero hay una generación también de jóvenes escritores que nosotros necesitamos que sean conocidos.
Eso impone también desafíos adicionales: cómo se piensan cada vez más las maneras de comunicación y de promoción en tiempos en los que no es posible hacer grandes tiradas, por ejemplo, de libros impresos. O sea, la Asociación está constantemente pensando en todo esto. Yo, en lo personal, siento una satisfacción tremenda cuando uno percibe el talento que hay en todo el país, cuando uno conoce también a escritores y artistas que están trabajando muchísimo, no solamente para que crezca su obra individual, sino también ayudando a otras personas, porque eso es algo que también nosotros mencionamos con mucha frecuencia. Nosotros aspiramos a que cada integrante de la Asociación, por supuesto, crezca, que tenga una obra cada vez más valiosa, pero aspiramos, sobre todo, a lo colectivo. O sea, que como generación sea más conocida, como generación tengamos un impacto cada vez más creciente para el bien de la sociedad cubana y que de verdad todos juntos podamos ser una vanguardia a favor de la cultura, a favor del país, de manera general.
Y hay otra cuestión en la que uno piensa constantemente, que es cómo, desde la Asociación, podemos motivar a otros sectores de la sociedad cubana. O sea, por eso aspiramos a estar constantemente en las universidades, en los preuniversitarios, que es donde se están formando las nuevas generaciones de profesionales en el país, pero también en los barrios de manera general. Cada vez más soñamos con un país que le siga dando mucha importancia a la cultura, que le siga dando mucha importancia al arte. Eso es parte indispensable, yo creo, del alma de la nación.
Además, conociendo que Cuba tiene otra particularidad que a uno lo llena de orgullo cuando revisa su historia, ahí están los grandes patriotas de este país, muchos de ellos estuvieron muy vinculados a la cultura, muchos de ellos también fueron intelectuales. Ahí está, por ejemplo, el caso de Carlos Manuel de Céspedes, que es una figura que uno admira muchísimo. Céspedes, que escribía poesía, que improvisaba décimas, que tocaba el piano. Ahí está Perucho Figueredo, el autor del Himno Nacional, que fue también un gran patriota. Esa era una generación que, de manera general, estaba muy cerca de la cultura. Ahí está el caso, por ejemplo, de José Martí. Es alguien que siempre nos tiene que guiar, es alguien en quien siempre debemos prensar. Todo lo que hizo Martí en el ámbito creativo, literario, cultural, y además el profundo compromiso que mostró también en lo social con la nación. Es el mismo caso de Fidel. Y así muchos otros ejemplos cuando revisamos la historia nacional. Yo creo que eso es algo que en las personas de la cultura debe ser motivo de orgullo siempre, pero a la vez nos debe impulsar y debe ser una guía que debemos tener muy presente nosotros.
IDG: Ya estaba trazando la ruta de lo que serán los próximos episodios, profesor, porque A Contracorriente, creo que ha tratado de sintetizar, siguiendo la ruta y tomando las palabras, esa unidad, esa colectividad, esa espiritualidad, esa sensibilidad. ¿Cuánto aportan todos esos conceptos –para cerrar este episodio–, a esa relación cultura-juventud en Cuba? ¿Cuánto aporta uno al otro? ¿Cómo se vislumbra desde la AHS ese vínculo cultura-juventud?
YTG: Eso es parte indispensable. Yo creo que la cultura nos hace mejores seres humanos, yo creo que nos hace afrontar la vida de una manera diferente, precisamente con eso, con más sensibilidad, con más espiritualidad, siendo capaces de buscar y construir también la esperanza. Es por eso que deseamos siempre una juventud cada vez más cerca de la cultura, una cultura también que siga estando muy cerca de los niños, de los jóvenes, en general. En Cuba tenemos una fortaleza enorme, que es todo un sistema institucional, una estructura enorme a lo largo de todo el país. Y uno siempre aspira que todo eso funcione de la mejor manera posible, que todo se articule para el bien de los jóvenes y de la sociedad en su conjunto.
IDG: Termino con sus reflexiones, muy válidas para dar pie a nuevos debates con Yasel, con quien estaremos conversando en próximos episodios de A Contracorriente.
