Los galenos cubanos -rememoró- fueron hostilizados, irrespetados, calumniados por las entidades médicas brasileñas, con el apoyo de los grandes medios, insensibles a la necesidad de la mayoría del pueblo de contar con profesionales de la salud dispuestos a un trabajo competente, humanista y solidario.
‘Rápidamente, gracias a la competencia, la ética y la dedicación profesional, los médicos cubanos – principalmente las mujeres – pasaron de malditos a preferidos por los usuarios del SUS’, exaltó Brasil Popular.
Las médicas cubanas, que debieron enfrentar el racismo y el machismo con que fueron recibidas por entidades brasileñas, son condecoradas ahora por la preferencia absoluta, espontánea y sincera de sus pacientes, quienes temen que el golpe que derribó a Rousseff afecte a un programa cuyo índice de aprobación supera el 90 por ciento, acotó.