Chile es uno de los países con mayor cantidad de infectados en la región: 2 mil diarios, y líder en el mundo en número de contagios por millón de habitantes. En respuesta el gobierno recurre a la vieja estrategia de desviar la atención hacia otro conflicto aplicando la doctrina del shock.
En este caso agudizan un problema histórico, la usurpación ilegal de tierras del pueblo Mapuche. Pueblo originario que hoy resiste a pesar de sufrir una brutal represión en su contra, torturas, asesinatos y violaciones a los derechos humanos.
En Chile se violan los derechos humanos, así lo corroboraron recientes informes de organismos internacionales de la ONU, Amnistía Internacional y Human Rigths Watch. En este sentido, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos CIDH, a través de su cuenta de twitter expresó: “La CIDH recuerda al Estado de Chile sus obligaciones de protección contra la discriminación fundada en origen étnico. Urge asimismo a las autoridades a prevenir, investigar y sancionar estos hechos, y a enfrentar las narrativas racistas contra las demandas del pueblo mapuche”.
Y es que en Chile hoy nos gobiernan los civiles de la dictadura militar los que nunca fueron juzgados.
El recién nombrado Ministro del Interior, Víctor Pérez, ex alcalde designado por el Dictador Pinochet, señaló en su reciente visita a Temuco el día viernes 31 de julio: “Tengo la convicción que esto puede agravarse… Enfrentamos grupos con capacidad militar y con financiamiento”.
Acto seguido el domingo 2 de agosto, decenas de “civiles” agredieron brutalmente a mapuches, incluyendo mujeres y niños, que se encontraban en municipalidades para exigir la libertad de prisioneros políticos que completan más de 91 días en huelga de hambre, entre ellos el Machi Celestino Córdoba, que se encuentra en estado de gravedad hace dos semanas internado en el Hospital Intercultural de Nueva Imperial.
Los Mapuches habían ingresado a municipalidades La Victoria, Curacautín y otras 3 comunas en la provincia de Malleco como una medida de apoyo a sus compañeros encarcelados.
La turba de “civiles”, fue convocada específicamente por la vocera del grupo APRA, Gloria Naveillan, que llamó a actuar contra comuneros de la municipalidad La Victoria.
El grupo Asociación para la Paz y la Reconciliación de la Araucanía (APRA) es un organismo de ultraderecha con vínculos directos con el partido político de Piñera; la Unión Demócrata Independiente UDI.
La Policía militarizada de carabineros no hizo nada para detener o evitar la violencia de los “civiles” armados con palos que además lanzaron piedras e incendiaron una camioneta de los comuneros mapuches.
Curiosa contradicción con las declaraciones del Pinochetista Ministro del Interior que refirió:“Estamos aquí trabajando con las policías para que tengan la capacidad de que esos grupos organizados y violentos puedan ser aislados y en eso vamos a trabajar”.
Es evidente la estrategia que implementa el gobierno de Piñera, primero construir una matriz de opinión que justifique el actuar violento de su aparato “civil”, de esta manera exime de responsabilidad a las fuerzas represivas del gobierno y el hecho aparece como una expresión de la “ciudadanía”.
Sin embargo, es evidente la complicidad, si comparamos el terror que se desató en contra de las manifestaciones pacíficas realizadas durante la cuenta pública el pasado viernes donde se registraron nuevos daños oculares causados por las mismas fuerzas represivas del gobierno.
Naomi Klein en La Doctrina del Schock señaló: “La verdad suena tan extraña. Estoy escribiendo un libro sobre el shock. Y sobre los países que sufren shocks: guerras, atentados terroristas, golpes de Estado y desastres naturales. Luego de cómo vuelven a ser víctimas del shock a manos de las empresas y los políticos que explotan el miedo y la desorientación fruto del primer shock para implantar una terapia de shock económica”.
El Estado de Chile reprime de manera cruel a los actores de la sociedad que se rebelan ante las causas de un problema estructural del sistema.
Y esta vez profundiza un conflicto histórico para desviar la atención de la profunda crisis sanitaria y sobre todo económica que se ha acelerado producto de la pandemia, pero que en realidad es consecuencia del capitalismo salvaje y las medidas económicas implementadas por la fuerza en desmedro de las y los trabajadores en Chile.
Marcelo Catrillanca, padre del mapuche asesinado, Camilo Catrillanca, luego de escuchar un reciente discurso del Ministro del Interior Pérez, señaló: “La pacificación ha sido una tortura se sigue matando gente, encarcelando gente y creo que el país entero con el descontento por este gobierno sigue demostrando lo mismo que decimos siempre, tiene que haber un cambio estructural, el presidente primero. En lo de las AFP se ha demostrado, en el estallido social y ahora con la pandemia la gente le ha dicho no al presidente” Diario Universidad de Chile, miércoles 29 de julio 2020 20:22 horas.
Las élites pretenden preservar el modelo económico que ha denigrado al Pueblo, a través de la fuerza y los mismos métodos de dominación muy bien aprendidos en la década de los 70 en los períodos de las Dictaduras en América Latina, donde se implementaron métodos de tortura física y psicológica.
La tortura, ya sea física o psicológica, viola la Convención de Ginebra, que prohíbe “Cualquier forma de tortura o de crueldad”.
El Consejo de Derechos Humanos de la ONU subraya “La necesidad de abordar la gestión de las concentraciones, como las manifestaciones pacíficas, a fin de contribuir a su pacífica celebración, prevenir muertes o lesiones entre los manifestantes, los transeúntes, los responsables de supervisar las manifestaciones y los funcionarios de las fuerzas del orden, y evitar cualquier tipo de violación o abuso de los derechos humanos”. Resolución 22/10. La promoción y protección de los derechos humanos en el contexto de las manifestaciones pacíficas, 2013.
En nuestro país la militarización cada día se incrementa, en la represión desatada se agrede a niños y niñas. Hoy es imperativo que Organismos Internacionales intervengan ante la creciente violencia del Gobierno de Chile hacia el Pueblo Mapuche y hacia las y los chilenos, el silencio los hará cómplices de la masacre.
La autora es Corresponsal de Crónica Digital y Analista Internacional.
La Habana, 3 de agosto 2020
Crónica Digital
Fuente: Crónica Digital