Cuba para mi es casa, familia  y amor. La casa grande de todos los cubanos, una gran familia que a través de la historia ha vivido para construir un bien común, con el amor a los símbolos patrios y el reconocimiento y la tutela de la identidad cultural como parte integrante del desarrollo de nuestra conciencia  social; un proceso clave para la auto comprensión de los valores culturales como parte de la dignidad y necesidad humana.

Cuba es Cultura, y es el conjunto de todas las conquistas alcanzadas por la Revolución. Cuba es resistencia cultural, es reconstrucción histórica de expresiones de lucha y unidad. Cuba es victoria, triunfo y es orgullo de sus hijos dignos.

Como artista cubana, bailarina y profesora de danzas folclóricas, la danza me da la oportunidad de salvaguardar la memoria histórica y cultural de Cuba, desde una visión que resalta los valores patrimoniales que trascienden las fronteras.  Pues asumo la tarea de transmitir el valor de nuestras expresiones folclóricas y populares, que son parte del patrimonio cultural inmaterial de la nación, desde una ética que enfrenta las tácticas del mercado sin banalizaciones, creando un método de enseñanza que promueve lo más auténtico de la cultura a partir de  un proyecto estético, expresivo y comunicativo.

Enseñar nuestras danzas es trasmitir la idiosincrasia de nuestro pueblo, promover conocimientos y con ello construir valores y sueños. Ellas son símbolos de identidad, trasmisores de valores y generadores de pensamientos y conciencia social, además son parte de la memoria colectiva de una nación.

Cuba es sentir el compromiso moral de difundir los valores éticos conquistados pese al injusto bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos. Es ser  portador y ejemplo de un sistema de valores, pensamientos y enseñanzas,  que nos concede el hecho de dar a conocer la Danza como una identidad cultural, y tener siempre presente a don Fernando Ortiz cuando expresó: «La cubanidad es condición del alma, es complejo de sentimientos, ideas y actitudes». Por esta razón en cualquier latitud que me encuentre CUBA VA CONMIGO.

 

Irma De La Caridad Castillo Ruiz. Licenciada en Arte Danzario, especialidad de Danzas Folclóricas en la Universidad de las Artes de Cuba.

Bailarina, profesora de danzas folclóricas y populares cubanas. Directora artística y vicepresidenta de Timbalaye promotor cultural internacional de la cultura cubana. Subdirectora de la Revista Timbalaye

Miembro de la Asociación Nacional Hermanos Saiz (AHS) 1987. Miembro de Honor de la Asociación Nacional Hermanos Saíz (AHS) 2009. Miembro de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC). Miembro de la Fundación Fernando Ortíz. Residente en Roma, Italia.

Por REDH-Cuba

Shares