“Es importante que el gobierno de EEUU permanezca tras bambalinas; y cuando sea posible, que limite su apoyo al entrenamiento, asesoramiento y aporte de materiales, a fin de no perjudicar el esfuerzo del gobierno local y exponer innecesariamente a EEUU a acusaciones de intervención y colonialismo.”
“Documento escrito por Richard Bissell, subdirector de Planes de la CIA, supervisor del Grupo Especial (contrainsurgencia), grupo que armó el documento de Defensa Interna de Ultramar por encargo de Kennedy en 1962. … Los hombres que trabajaron con él en este grupo también se habían formado en Harward, Princeton y Yale. … Los países del Tercer Mundo se habían reunido hacía poco en septiembre de 1961 en Belgrado (Yugoslavia) para organizar el movimiento de Países No Alineados (MPNA). Es por eso que el Grupo especial subrayó el carácter encubierto de sus operaciones. El poder de Estados Unidos debía ejercerse mediante la acción militar (guerras asimétricas), pero también mediante el uso de medidas tales como incentivos y sanciones económicas así como apoyo a la policía y a las fuerzas militares locales (guerras híbridas).”
Párrafos del libro, absolutamente recomendable, titulado Balas de Washington. Historias de la CIA, intervención y golpes de Estado. Historias de la CIA, intervención y golpes de Estado. Traducción de Paula Gürtler. Prólogo de Evo Morales. Bellaterra Edicions.
Las figuras públicas de la aparente izquierda que provienen de la franja intelectual, siempre han tenido el respaldo de medios de difusión de los monopolios con apariencia crítica, siempre han movido a personajes captados por el aparato defensor de la burguesía, que los destina a una dirigencia de los movimientos sociales en crecimiento, su labor es absorver cuadros de ese movimiento, integrarlos en la institucionalidad, e ir disolviendo, vaciando de contenido, descomponer las organizaciones de clase mediante la desorientación, la generación de desconfianza política, y la paralización de la lucha en marcha, hasta secar sus cauces en el orden establecido. Un libro famoso que muestra la labor de la CIA entre los intelectuales es el de Frances Stonor Saunders titulado La CIA y la Guerra Cultural, también hay información en el artículo siguiente: https://www.resumenlatinoamericano.org/2017/06/30/la-cia-desclasifica-documentos-de-su-colaboracion-con-intelectuales-progresistas/ Con respecto al Estado español hay un libro que recoge la actividad de los franquistas encubiertos en el campo intelectual, el libro se titula: Disidencia y subversión. La lucha del régimen franquista por su supervivencia, 1960-1975, se encuentra en Editorial Crítica, su autor es el historiador Pere Isas.
La influencia cultural es uno de los terrenos más importantes en la conquista de las voluntades, la reacción siempre ha invertido en ello en medios y captación de personajes que pueda poner a la cabeza de la crítica social. Todos conocemos a intelectuales que acaban en tareas de grandes cadenas monopolísticas, habiendo ejercido en política social y gubernamental. La batalla cultural le merece la pena a la gran burguesía, su dominio de las mentes le da el silencio de la crítica que necesita para mantenerse victoriosa.
Tras semejante observación, hay que elevar la vista y fijarla en el enemigo táctico de la clase obrera en la lucha por su liberación: la burguesía nacional, y en quien permanece oculto tras ella: la élite imperialista. Una franja primera a la que desde los fondos oscuros le llueve una capa brillante de aparente de izquierda labora en la influencia cultural por el desafecto y la apatía, sirviendo los elegidos en el campo político. En el Estado español y discurriendo por Latinoamérica, se ciega y encharca a las mayorías con un discurso publicitado por los medios generalistas, ambíguo, cuajado de términos característicos de la izquierda, son los “progres” los que van engrasados e injertados en la cresta de esa ola, tienen las características de la pequeña burguesía ilustrada, a la que alimenta en sus aspiraciones los organismos del aparato imperialista, la CIA, la NED, la USAID y sus demás operarios de la corrupción, la falsificación y creación de líderes de “izquierda” falsos.
Mientras consiguen ese propósito desmoralizador ayudan en la adaptación de nuevos recortes democráticos, económicos sociales y aprueban leyes de violencia institucional. Para eso sirve enfriar la calle, y el proyecto político de la burguesía nacional se extrema y crece y se fortalece públicamente, hasta mostrar como salvador al cuerpo dirigente de la guerra de la élite imperial.
No es casualidad que en el Estado español las corporaciones publicitarias haya ensalzado primero a una supuesta “izquierda” que ha ido destruyendo organizaciones, disolviendo la conciencia de clase, uniéndose al sector de la derecha que utiliza el término “socialista”, para formar gobierno como respaldo del orden de la gran burguesía europea, porque ya no hay ni gobierno local, ha desaparecido la soberanía en la barriga de la ballena de la élite europea estadounidense engordada con la burguesía servil a la élite imperial, que ya sin tapujos se manifiesta nazi.
Antes de terminar me pregunto ¿desde cuándo la defensa del imperio de EEUU, de la OTAN, y de la guerra para balcanizar países y robarlos, desde cuándo entregar los bienes públicos a las corporaciones multinacionales, desde cuándo sostener leyes represivas del pasado y proyectar otras de semejante carácter, desde cuándo apoyar / aceptar leyes laborales destructivas del tejido laboral, desde cuándo empobrecer a las mayorías trabajadoras para enriquecer a la minoría interior y exterior… desde cuándo eso es defender los intereses de la clase obrera? La última integración electoral ha dado la dirección del país a la burguesía nacional más reconocible, detrás dirige su soporte imperialista. Esos derechistas de “izquierda” han cerrado las salidas a la clase trabajadora y han cumplido el encargo. ¿Quién defiende la ética basada en Derechos sociales, laborales, económicos, políticos de la clase trabajadora del estado español, del continente, de los restantes continentes?
La ética basada en esos Derechos es la expresión de la práctica de los pueblos que buscan la mejora social, la transformación, la superación de obstáculos, eso que tiene el nombre de Revolución. De esa práctica de los pueblos se desprende su ética, el conocimiento de la verdad, cuya base es la objetividad. ¿Se recompondrá lo que han derruido los diferentes actores al servicio de los oligarcas españoles, europeos y estadounidenses?: Si, definitivamente Si. Pero hay que reaprender, no hay que olvidar quién es el que está enfrente.
¿Recuerda usted el primer documento que presenté?: “Es importante que el gobierno de EEUU permanezca tras bambalinas; y cuando sea posible, que limite su apoyo al entrenamiento, asesoramiento y aporte de materiales, a fin de no perjudicar el esfuerzo del gobierno local y exponer innecesariamente a EEUU a acusaciones de intervención y colonialismo”, su autor es Richard Bissell, subdirector de Planes de la CIA, supervisor del Grupo Especial (contrainsurgencia), pues lea usted el documento elaborado por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos, cuando lo dirigía Dick Cheney, el criminal de la guerra de Irak con su gran mentira de las armas de destrucción masiva, fue escrito en 1990 y dice lo siguiente: “Nuestro primer objetivo es evitar la reaparición de un nuevo rival, ya sea en el territorio de la ex Unión Soviética o en otra parte, que represente una amenaza al orden como la Unión Soviética. Esta es la principal preocupación y exige que nos esforcemos por evitar que cualquier poder hostil domine una región cuyos recursos serían, bajo un control consolidado, suficientes para generar un poder mundial. Nuestra estrategia debe ahora reenfocarse en evitar la aparición de cualquier potencial competidor mundial a futuro.”
Otra vez el imperio. Desde entonces han venido preparando, expresamente, la sustitución de la fuerza social por actores capaces de desorganizarla, para que nos encontremos de frente lo que hoy estamos viviendo, en condiciones de máxima debilidad política y social, en el Estado español, y no saquemos, en mucho tiempo, fuerzas con las que exponer nuestros intereses como clase trabajadora. El espacio de la intelectualidad de clase obrera está desierto. Hoy campea la influencia cultural de los hollywood. Hacen falta intelectuales de raíz, escudos de los derechos de la clase obrera que resistan a los corruptores, capaces de levantar las palabras del gran poeta Gabriel Celaya: es hora de mostrarnos a cuerpo y mostrar que, pues vivimos, anunciamos algo nuevo.