A propósito de la campaña de desinformación orquestada desde los medios adversos a la izquierda latinoamericana y a la Revolución Bolivariana en Venezuela, Granma contactó vía Twitter con la profesora y politóloga española Arantxa Tirado Sánchez, autora del libro La clase obrera no va al paraíso.
A causa de sus videos en las redes sociales, donde muestra la tranquilidad en las calles de Venezuela, recibió amenazas y se volvió viral como líder de opinión independiente.
–Arantxa Tirado, hemos visto sus declaraciones a propósito de su visita a Venezuela, sin embargo queremos saber qué opina usted sobre el actual estado de las calles en ese país y cuáles de los puntos de esa matriz de opinión mediática considera falsos.
–No me tocó presenciar ninguna marcha o movilización, en ningún sentido político. Aunque los medios en España reportaban días antes que las calles de Caracas estaban prendidas con protestas. Creo que los medios en España inflaron las protestas puntuales que hubo en los días previos a mi llegada, la matriz de un amplio rechazo al chavismo en las calles no es tal.
–Quisiera que nos describa esa matriz mediática, en cuanto a su discurso y finalidad, y por quiénes cree que pueda estar guiada en primera instancia.
–Prácticamente se remonta a los inicios de la Revolución Bolivariana, al momento en que los grandes capitales entendieron que el presidente Chávez tenía un proyecto soberano propio que pasaba por recuperar el control de la industria petrolera, fundamental para el funcionamiento del capitalismo actual, que es un capitalismo fósil, como lo denomina Elmar Altvater.
«Además de ridiculizar la figura presidencial, también se dedicaron, páginas y páginas, a deformar la naturaleza y la realidad del proceso bolivariano, tildándolo de dictadura, se destacó su componente militar como algo negativo (esto con la finalidad de generar rechazo entre la izquierda europea y latinoamericana, muy renuente a la influencia militar en el gobierno)».
–¿Existe una crisis humanitaria en Venezuela, como dicen esos medios, teniendo en cuenta lo que Naciones Unidas considera una crisis?
–Una crisis humanitaria, según los organismos especializados, es una situación de emergencia, provocada por un conflicto bélico o un desastre natural, que se complica por la existencia de una serie de factores (pobreza, mala gobernabilidad, precariedad alimentaria y violaciones a los derechos humanos). Esta afectación a las personas, que quedan desvalidas porque el Estado en cuestión no tiene capacidad de intervenir, es lo que justifica una intervención humanitaria.
–Nada de esto está sucediendo ahora mismo en Venezuela. ¿Estamos ante un modelo de golpe de Estado, que luego pudiera aplicar el imperio en otros escenarios como Cuba y Nicaragua?
–Que Marco Rubio o Mario Díaz-Balart estén liderando ahora mismo la ofensiva contra Venezuela, presentándose en primera línea en la frontera, no es casual. Ven en la posibilidad de acabar con el chavismo la posibilidad de acabar con el castrismo (como ellos le llaman al socialismo cubano).
«No obstante, de triunfar el golpe de Estado del señor Juan Guaidó en Venezuela el peligro será asentar la posibilidad del desconocimiento institucional y de la soberanía de cualquier Estado por parte de la discrecionalidad de la comunidad internacional. Y, por supuesto, el costo en vidas humanas».
Fuente: Granma