“Debemos admitir que hemos expulsado a personas pobres de sus humildes moradas y les hemos quitado el pan de la boca (…) ¿puede perdurar semejante modo de adquirir la tierra? ¿Callarán para siempre quienes han sido expulsados y aceparán tranquilamente lo que les hemos hecho?
Del documento con el título “La cuestión oculta”. Autor: el sionista Yitzhak Epstein. Del libro “La cuestión oculta”. Ed. Bósforo libros. bosforo@bosforolibros.com
30 de Marzo de 1976, hoy 43 aniversario de la Huelga General en Palestina. Fue contra la ocupación colonial, contra la expulsión del Pueblo Palestino, contra el apartheid, contra el robo de tierras, contra los crímenes sionistas, todo eso condujo a esta gran movilización. Entonces los sionistas asesinaron a 6 Palestinos y causaron más de 1.000 heridos.
30 de Marzo de 2018, hoy aniversario 1º de la Gran Marcha por el Retorno a Palestina y por la Libertad de Gaza. Los sionistas han asesinado a 300 Palestinos y han causado 30.000 heridos.
Los dos acontecimientos son la misma bandera de Resistencia de nuestro tiempo al neocolonialismo y al imperialismo, y es uno y el mismo en la ilegalidad, uno y el mismo en la inhumanidad. Es igual que los dirigentes sionazis, sean los financieros, los representantes político-militares, los sionistas mercenarios, ellos lo saben, y los que les miramos de frente también lo sabemos: ilegalidad e inhumanidad.
“¿Me han usurpado mi tierra? ¿Me han privado de mis derechos / y me voy a quedar aquí, uncido al exilio, humillado y desnudo? / ¿Me voy a quedar aquí a morir como un extraño en tierra extraña? / ¿Me voy a quedar? ¿Y quien lo ha dicho? Volveré a la tierra amada. / ¡ Por supuesto que volveré ! Y allí se cerrará el libro de mi vida. / Se apiadará de mí su tierra generosa y dará y dará cobijo a mis cenizas. / ¡Regresaré, es necesario que vuelva!”
Poema titulado “La llamada de la tierra”. Autora, la gran poetisa palestina Fadwa Tuqan.
Era el 30 de Marzo de 1976, el ejército que formaron los financieros sionistas con mercenarios traídos de cualquier parte del mundo, ponía sus botas sobre una tierra que le era ajena, y siempre les había sido extraña, no les importaba nada más que la paga de sus amos.
Los organismos internacionales han emitido su condena de tales individuos agrupados bajo el nombre de Israel una y mil veces, su comportamiento hacia el Pueblo Palestino y el ideario que alientan han sido tachados como propio del nazismo. Racistas, asesinos y ladrones que tienen el respaldo del imperio estadounidense, imperio que desde el final de la 2ª Guerra Mundial se ha expandido y amenaza la existencia misma de la vida en la Tierra. El ente creado en suelo de Palestina, brazo armado de ese imperio, es la empresa de neocolonización que adelanta las posiciones del terror en Oriente Medio y presta servicio al polígono de la Casa Blanca o complejo industrial-militar estadounidense.
“Sobre esta tierra hay algo que merece vivir / sobre esta tierra esta la señora de la tierra, / la madre de los comienzos, la madre de los finales / se llamaba / Palestina, se sigue llamando Palestina. (…)
Poema titulado “Sobre esta tierra”. Autor, el gran poeta palestino Mahmoud Darwish.
Todos los días, las horas, los minutos para el Pueblo Palestino son de amor a su tierra, a su Historia, es una relación invencible con sus antepasados.
Palestina es un sólo cuerpo geográfico, cultural, religioso para su pueblo originario.
Palestina es el corazón en ese cuerpo que llamamos Mundo Árabe, Oriente Medio, y que siempre ha estado en el punto de mira de los colonizadores, del movimiento sionista y del imperio.
Con eso quiero decir que siempre ha estado en sus proyectos de robo, en su área especial de crímenes a realizar, unas veces secretos, otras públicos, Acuerdos, Tratados, Sykes-Picot, Balfour, reparto de Palestina desde la ONU en 1948, Guerra de los 6 días, 1967, Oslo, … , hasta hoy con el Acuerdo del Siglo, presentado por Trump. Todos los presidentes estadounidenses han puesto sus ojos en Palestina, desde Eisenhower, como prueba les dejo aquí sus declaraciones cuando era el jefe de la OTAN:
“El valor regional más importante está en Oriente Medio. Es la principal fuente de recursos para la civilización de hoy. El dominio de Palestina es la garantía para el control de las fuentes de petróleo y el transporte para suministrar a Europa y el mundo Occidental”. Hoy es Trump el que quiere dominar el área, trata de ultimar la tarea imperial de los anteriores aunándose al sionazismo sin ningún tapujo, sin escrúpulo ninguno. Trump, nada más llegar al poder declaró el proyecto imperial para Palestina, quería decir al mundo que es su terreno estratégico. No ha dicho o hecho nada fuera del proyecto sionista, no ha dicho o hecho nada fuera de sus intereses imperiales, no ha dicho o hecho nada que no atente contra los Derechos, la libertad y la soberanía de los pueblos. Pero aquí estamos quienes defendemos los Derechos, la libertad y la independencia y soberanía de Palestina y su Pueblo, quienes amamos a Palestina y a su Pueblo, quienes la defendemos de mil maneras y todas legales y heroicas.
Hombres, mujeres y niños han dado, y siguen dando, lo mejor de su vida enfrentando a un Estado que los sionistas y los imperialistas crearon sobre la base de la mentira y la falsedad.
Ese Estado de sionazis-imperialistas, Estado de Apartheid, que se reconoce así mismo como racista, separado de los Derechos Humanos, de las Leyes Internacionales, ese Estado inventado, ilegal, del que el profesor Shlomo Sand, profesor de la Universidad de Tel Aviv, muestra en su libro “La invención de Israel” como creación artificial de finales del siglo XIX, y no más atrás, o el historiador israelí Ilan Pappé, en su libro “ Los palestinos olvidados. Historia de los palestinos de Israel”, Ed. Bósforo, nos transmite el objetivo final de los planes sionazis: “ En 2010, los personajes más poderosos del gobierno de Israel – el ministro del Interior, Eli Yishai, el ministro de Asuntos Exteriores, Avigdor Lieberman, y el ministro de Seguridad Interna, Yitzhak Aharonowitz – declararon sin tapujos, tanto dentro como fuera de Israel, que la estrategia del Estado judío para la próxima década consistía en trasladar a los palestinos, despojarles de la condición de ciudadanos y judaizar sus ciudades”. Después, con Netanyahu a la cabeza, han aprobado su Ley del Estado Nación racista, “sólo para judíos”, queriéndose tragar a Palestina sembrada de asentamientos, que son declarados por la Convención de Ginebra “Crímenes de guerra”, y, en línea con tal Contraderecho, Trump ha disparado al corazón del Mundo Árabe, al corazón de Oriente Medio, el proyectil que ha llamado Acuerdo del Siglo, intentando hundir el Derecho Internacional.
La respuesta a la combinación de todos los planes basados en mentiras, traiciones e ilegalidades la dio un Joven Palestino de 18 años, se lanzó a defender su legado, su país, la vida del Pueblo Palestino, con un cuchillo de cocina, sin pertenecer a ningún partido, a ninguna organización, se llamaba Omar Abu Laila, y ha escrito una página brillante en contra del Acuerdo del Siglo, contra los Acuerdos de Oslo, contra la ocupación, contra el apartheid, contra el racismo sionazi.
Omar Abu Laila declara que este pueblo dará fin al neocolonialismo y al imperialismo.
No olvidemos: 30 de Marzo de 1976, hoy 43 aniversario de la Huelga General en Palestina contra la ocupación colonial, contra la expulsión del Pueblo Palestino, contra el apartheid, contra el robo de tierras, contra los crímenes sionistas, todo lo que condujo a esta gran movilización. 43 años de Días de la Tierra.
30 de Marzo de 2018, hoy, Primer aniversario ya de la Gran Marcha por el Retorno a Palestina de los 7 millones de Refugiados y contra el bloqueo sionazi a Gaza.
Por último quiero recordar un poema del gran poeta Palestino Rafee Ziadah: “ Mi madre nació bajo un olivo / en la tierra que dicen que ya no es mía. / Pero cruzaré las barreras / sus locos muros del apartheid, / y volveré a mi hogar.”
¡Con todo mi corazón! ¡Con toda mi conciencia! ¡Con toda mi vida!: ¡Viva Palestina Libre! ¡Viva el 30 de Marzo!