La historia de Cuba se remonta a 10 000 a. n. e. seguidos de la colonización española, cuando Cristóbal Colón llegó a “la tierra más hermosa que ojos humanos han visto”, allá por el año 1492, según rezan sus propias palabras registradas a lo largo de nuestra existencia como cubanos.
Nuestra pequeña pero heroica Isla ha tenido una larga historia de luchas. Y es que no podemos olvidar períodos antecedentes como el de la colonización española, en el cual Cuba fue despojada de sus riquezas naturales parando en arcas del reinado español, mientras nuestros indios eran explotados, asesinados y obligados a creer en la religión católica importada desde Europa. Más adelante, en el período de la esclavitud, hombres y mujeres provenientes de África fueron traídos a Cuba para realizar trabajo esclavo. En este caso, tampoco hubo un atisbo de consideración de la cultura civilizada de aquellos tiempos para considerarnos como iguales y así fue desarrollándose la conciencia libertaria del pueblo cubano.
Llegaron así los primeros gritos libertarios con las guerras de independencia, cuando el 10 de Octubre de 1868 Carlos Manuel de Céspedes da la libertad a sus esclavos y poco a poco estos se fueron sumando a la lucha de los cubanos contra el coloniaje español. Aquel brillante día los cubanos inauguraron la vía de la lucha armada para resolver las contradicciones imperantes en la sociedad colonial en que vivían. Este período fue la etapa colonial que tuvo su final en el año 1898, cuando pasamos a convertirnos en una neocolonia de los Estados Unidos debido a la acción anexionista de los que tuvieron en sus manos en aquel momento la libertad de Cuba, entregada vilmente a Norteamérica y comenzando una nueva etapa de luchas por nuestra verdadera independencia.
Fue así que surgieron los próceres de la libertad de Cuba. Aquellos que hoy están presentes en la sangre de cada cubano que lucha por defender la libertad alcanzada en Cuba. Esa libertad lograda el 1ero de Enero de 1959, cuando Fidel Castro Ruz, nuestro líder histórico, logró despojar del poder a dictador Fulgencio Batista y sus lacayos asesinos que huyeron llevándose el dinero del pueblo.
Quienes pensaron que en pocos meses regresarían a ocupar esta Isla, ya casi cumplimos 60 años de Revolución Cubana en el poder, por lo que somos la piedra en el zapato de los cubanos-norteamericanos descendientes de los antiguos burgueses cubanos, que no cesan en su empeño de arrebatarnos nuestras conquistas.
Sin embargo, nuestros principios y nuestra soberanía como nación, con el ejemplo de Fidel y su legado a las actuales y futuras generaciones de cubanos y pueblos amigos de Cuba, nos hace resistir las agresiones de todo tipo a las cuales hemos estado sometidos por las disímiles administraciones norteamericanas. Esas mismas administraciones que congraseándose con la Mafia Cubanoamericana de Miami, recibieron la primera gran derrota del imperialismo yanqui en América, durante el ataque a Playa Girón, y que como respuesta recibieron también el espíritu de resistencia del pueblo cubano a las limitaciones impuestas por el cruel, genocida, injusto, unilateral y extraterritorial bloqueo contra nuestra pequeña e irredenta Isla.
Cuba hoy se encuentra entre los países con mayor desarrollo en las áreas de salud y educación gratuitas y de calidad. Esas conquistas sociales la colocan entre los países con mejores resultados, por encima de países del primer mundo como EE.UU. Y es que en este pequeña Isla del Caribe la mortalidad infantil es de solo 4,1 fallecidos por cada mil nacidos vivos, todos tienen derecho a la educación, las mismas oportunidades de desenvolverse como seres humanos y la conciencia política y revolucionaria que nos permite hoy ver más allá de los que nos dicen los medios hegemónicos de la des-información dominados por la clase oligárquica burguesa y corrupta.
Somos un pueblo instruido y dispuesto a darlo todo por conservar la independencia por la cual dieron sus vidas muchos de nuestros más valiosos hombres y mujeres. Por eso, somos la luz que guía el oscuro camino del neoliberalismo en el continente y apoyamos las luchas revolucionarias de nuestros hermanos de la Patria Grande Latinoamericana del Ché, Bolívar, Martí, Chávez, Fidel, entre otros. Ganemos en conciencia y organización revolucionaria y los sueños de un mundo mejor se harán realidad.